El fin de la infancia abre un abismo de realidad en el que los sueños y la magia están prohibidos. Los recuerdos y la idealización son el único recurso que les queda a los protagonistas para sobrevivir a un mundo impersonal, frío y cruel. Algunos aprenderán la inutilidad de la nostalgia cuando la memoria distorsione su pasado mientras que otros comprenderán su valor demasiado tarde. La soledad y la marginación, a veces buscada, los llevará a soñar criaturas a las que luego destruirán por contradecir la Ley Natural.
Entre máscaras y falsas apariencias envidiarán lo que para otros es infelicidad, se arrepentirán de las oportunidades desperdiciadas y de las decisiones tomadas al calor de obsesiones y absurdas manías y encontrarán una venganza desgarrada entre las llamas de una casa destruida por un espejo. El alcohol, el peregrinaje sin rumbo, el miedo y la confusión harán surgir insectos y voces que precipitarán el final de estos soñadores...